Redacción (Agencias).- El candidato republicano Donald Trump defendió este miércoles su plan para impulsar la migración legal y proteger los puestos de trabajo en Estados Unidos ya que, en su opinión, son los nuevos migrantes sin papeles los que están teniendo un impacto negativo en el panorama laboral.
“Muchos de los empleos que tú tienes los están tomando estas personas que vienen y la población hispana está perdiendo empleos ahora porque millones de personas están llegando”, dijo el exmandatario durante una sesión organizada por la cadena hispana TelevisaUnivision en la ciudad de Doral, Florida, donde varios ciudadanos de origen latino escogidos independientemente pudieron formular preguntas a Trump.
La cuestión migratoria ocupó gran parte de su intervención. Trump aprovechó su tiempo para cargar duramente contra las medidas tomadas por la administración actual liderada por el presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris, indicando que sus políticas se han basado en “fronteras abiertas”.
Además, denunció que muchos países, “no sólo de América Latina”, aprovecharon esta situación para “sacar de sus cárceles a criminales y mandarlos a Estados Unidos”, afirmaciones que ya expresó antes y que no se han confirmado.
“Están vaciando las cárceles, de Venezuela, pero no solo de Sudamérica, sino de todo el mundo. La población encarcelada del mundo ha bajado porque han venido a Estados Unidos”, afirmó, al tiempo que aseguraba que “en muchos países han liberado a cientos de miles de personas que son asesinos, narcotraficantes o terroristas”.
Impacto negativo en el panorama laboral
“Nadie sabe de dónde vienen”, advirtió el candidato republicano durante su participación en el cabildo, que duró una hora y cuya emisión tendrá lugar esta noche en la cadena televisiva.
En esa línea, reiteró en que la Casa Blanca “ha perdido el control” sobre la migración y tildó a Biden y Harris como “el peor presidente y vicepresidenta que ha tenido este país”. “En 25 años no ha pasado algo tan grave, hace cuatro años estábamos bien, ahora no”, agregó al respecto.
A la pregunta por sus comentarios sobre los migrantes haitianos en la ciudad de Springfield, Ohio -cuando dijo que “comen perros y gatos”-, Trump se limitó a señalar que “eso fue algo que se reportó” y que él se hizo eco de esa información, admitiendo que no tenía conocimiento de primera mano sobre esa situación, algo que ya desmintieron las autoridades de ese estado.
“Voy a volver ahí y daré un reporte, pero en Springfield viven 52.000 personas y si se agregan más de 30.000 migrantes, esa población no va a poder acceder a un hospital, no va a poder comprar víveres, ni siquiera pagar la renta”, dijo sin dar argumentos sobre las consecuencias directas que, a su juicio, afectarían a los residentes de ese lugar.
Por Antoni Belchi / VOA