Redacción (Agencias).- Investigadores de la Universidad Bar-Ilan desarrollaron un nuevo enfoque para tratar la enfermedad de Alzheimer en etapa temprana que retardaría el progreso de la enfermedad y mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias.
Mediante el uso de nanopartículas, que pueden controlar con rayos X muy débiles, pueden atacar una forma particular de proteína en el cerebro que ahora se cree que es responsable del deterioro cognitivo.
El Alzheimer es la forma más común de demencia y afecta a aproximadamente 6,7 millones de personas en Estados Unidos. Los investigadores que buscan un tratamiento eficaz para esta enfermedad han centrado sus esfuerzos, durante los últimos 30 años, en una proteína conocida como beta amiloide (A-beta), que forma grupos en el cerebro.
Estos grupos de proteínas A-beta atacan a las células nerviosas, lo que inicialmente provoca un deterioro de la memoria a corto plazo y más tarde la pérdida del juicio, el lenguaje y los procesos de pensamiento.
Otros investigadores han desarrollado previamente un anticuerpo que puede identificar y unirse a las proteínas A-beta y retrasar la progresión del Alzheimer en pacientes con deterioro cognitivo temprano a leve hasta en un 36%.
Los investigadores de Bar-Ilan, en colaboración con científicos de la Universidad italiana de Milano-Bicocca, pretenden ir un paso más allá con su estrategia de tratamiento.
Utilizan nanopartículas que se activan mediante rayos X de energía ultrabaja para detener eficazmente el dañino proceso de agregación de las proteínas A-beta.
Retardaría el progreso de la enfermedad
Las nanopartículas atacan el proceso de la enfermedad en una etapa muy temprana para evitar que se formen grupos tóxicos de A-beta antes de que puedan comenzar a dañar el cerebro. El uso de rayos X de energía ultrabaja también minimiza la exposición del paciente a la radiación.
El equipo de investigación ha patentado su tecnología de nanopartículas, que hasta ahora ha demostrado ser exitosa en pruebas en animales y dice que se están realizando más investigaciones para optimizar el régimen de tratamiento y evaluar su eficacia a largo plazo en pacientes humanos en entornos clínicos.
«Este enfoque ha mostrado resultados prometedores en cultivos de células neuronales y modelos animales, ofreciendo nuevas posibilidades para una intervención temprana en la enfermedad de Alzheimer«, afirmó el profesor Shai Rahimipour, del Departamento de Química de la Universidad Bar-Ilan.
«Nuestro objetivo final es desarrollar un tratamiento seguro y eficaz para personas en las primeras etapas del Alzheimer, centrándonos en aquellos con alto riesgo, como aquellos con Alzheimer familiar», dijo. «Al apuntar a la agregación de A-beta en etapa temprana, nuestro objetivo es prevenir la progresión de la enfermedad y mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias».
