Santo Domingo (Rep. Dominicana). – La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones) aportaron RD$14,000,000.00 en equipos a las instituciones del gobierno que impulsan el Proyecto de Promoción de Lactancia Materna para instalar el banco de leche en el Hospital Regional Doctor Marcelino Vélez Santana, en Santo Domingo Oeste.
La donación la entregó Elder Orlando Castaños, Setenta (responsable) del Área del Caribe de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, a Josefa Castillo Rodríguez, directora ejecutiva del Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (Inaipi), Martha Nina, coordinadora del Programa Nacional de Lactancia Materna del Ministerio de Salud y Martín Ortiz, director de la Dirección Materno Infantil del Servicio Nacional de Salud (SNS) y el doctor Willy Victoria Ramírez, director del hospital Dr. Marcelino Vélez Santana.
Al hacer la entrega Castaños dijo que, como parte de su misión de apoyar a los necesitados, la iglesia brinda ayuda humanitaria en todos los países en donde tiene presencia.
“En la República Dominicana, (la iglesia) ha colaborado en numerosos proyectos en los ámbitos de salud, asistencia en desastres naturales, alimentación, nutrición y educación”, agregó.
Para instalar el banco de leche
Precisó que el proyecto incluye un componente de capacitación, información y sensibilización sobre lactancia materna, destacando la importancia de los bancos de leche para salvar vidas y la difusión de los beneficios de la lactancia materna.
El objetivo del proyecto es ofrecer leche materna pasteurizada a los recién nacidos prematuros y otros lactantes con condiciones de salud que les impiden a las madres amamantarlos directamente para garantizar el aporte de nutrientes esenciales y anticuerpos, con lo que disminuye el riesgo de infecciones y mejora el pronóstico de vida de estos, explicó.
En tanto que, Castillo dijo que la contribución posibilitará optimizar los procesos de recolección, almacenamiento, procesamiento, conservación y distribución de la leche materna en el nosocomio y con ello garantizar el suministro adecuado y seguro para los recién nacidos que lo necesitan, en especial aquellos de cuyas madres, por diversas razones, no pueden proveer de forma exclusiva el alimento a sus hijos.
