San Pedro de Macorís (Rep. Dominicana).- En un operativo conjunto, la Procuraduría Especializada contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo y agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) ocuparon bienes y propiedades a una alegada estructura de narcotráfico que operaba en la provincia San Pedro de Macorís.
La incautación se realizó mediante allanamientos simultáneos en esta localidad. Los agentes y fiscales actuantes ejecutaron la orden de incautación contra varios inmuebles pertenecientes a los imputados Yunior Santos Restrepo y Yoanna Altagracia Reyes Ruiz, ambos señalados como parte de la aludida estructura criminal.
Entre los bienes retenidos figuran, una villa, ubicada en el residencial Garden Village, de dos niveles y un solar en el Residencial Bonaire, del complejo turístico Playa Nueva Romana; un apartamento en el condominio Yulis, en el sector Los Maestros, así como un solar, ubicado en la calle Luis Amiama Tió, sector Hazim, provincia de San Pedro de Macorís.
En noviembre del pasado año los organismos incautaron 93 paquetes de cocaína, armas de alto calibre, dinero en efectivo, prendas y vehículos de alta gama que atribuyen a presunta organización.
Ocuparon bienes y propiedades
Ese mismo mes, a la supuesta estructura criminal se le incautó un drink, una casa de cambio, una villa, dos apartamentos, dos fusiles, (Uno AK-47 y otro calibre 5.56), una escopeta, cuatro pistolas (una Five Seven, dos Glocks y una Beretta), dos chalecos antibalas, municiones de distintos calibres y dinero en pesos y dólares.
Además, las autoridades ocuparon una yipeta marca Changan y una camioneta Toyota, modelo Hilux, dinero en efectivo, teléfonos celulares y documentos personales.
El órgano investigativo señaló que, para desmantelar esta red de narcotráfico realizaron intervenciones en residencias y locales comerciales, donde se apresaron a Danilo Piñeyro Aristy (Tiburon & Ricky Team), Yohan Altagracia Reyes Ruiz y a Hellwy Santos Restrepo.
Durante las pesquisas las autoridades determinaron que la desmantelada estructura de narcotráfico enviaba drogas a la vecina isla de Puerto Rico, Estados Unidos y Europa, a través de lanchas rápidas, aeropuertos y puertos del país.