El recién realizado encuentro de los principales líderes y candidatos a la Presidencia de la República de la denominada Alianza Rescate RD, ha dejado al país con un regusto amargo, ya que antes que un encuentro, pareció más bien una farsa de circo y mal montada.
Una oposición que tiene poco qué ofrecer a la nación, como no sea los ya gastados y desgastados discursos de siempre. Discursos en los que nadie cree, salvo unos pocos ingenuos.
Los saludos parecían obligados. El abrazo entre Danilo Medina y Leonel Fernández, formó parte del espectáculo que pasó de lo absurdo a lo puramente ridículo.
¡Ironías de la vida! ¡No te me acerques mucho, que doy un pescozón! Parecía decirle el líder del Partido de la Liberación Dominicana, Danilo Medina a Leonel Fernández, en tanto la cara de este último semejaba una naranja agria recién exprimida.
De lo absurdo a lo ridículo
La tapa se la puso al pomo, la absurda y ridícula aparición de la trapecista principal, Margarita Cedeño, quien, en un ¿olvido? Lo dudamos, se devolvió en medio de los abrazos y saludos de rigor, para, de manera poco elegante dar vuelta atrás y estrechar efusivamente a su exesposo Leonel Fernández.
Lo que inició como un absurdo acto de circo, terminó como la historia de la Gran Entente, la famosa coalición entre Rusia, Francia e Inglaterra, que terminó como la fiesta de los monos, al iniciar la Primera Guerra Mundial, un penoso ridículo.
Asistimos ahora al famoso momento en que todos están juntos, pero no reburujaos.
¡Válgame Dios y líbrenos del mal! Amén.
Si de esa manera es que pretenden rescatar al país, ¡nos fuñimos!