Redacción (Agencias).- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) intensifica sus esfuerzos para apoyar la lucha contra un notable aumento en casos de dengue en Centroamérica
En comparación con el año pasado, la región ha experimentado un incremento del 98 % en la incidencia de esta enfermedad.
En todo el continente americano, 2024 ha marcado un récord, con más de 11 millones de casos reportados y más de 5.900 muertes relacionadas.
Desde 2023, en colaboración con la Secretaría Ejecutiva del Consejo de Ministros de Salud de Centroamérica y República Dominicana (SE-COMISCA) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, se ha puesto en marcha un plan integral que abarca capacitaciones en gestión, diagnóstico, manejo clínico y control de vectores.
Esta estrategia incluye la actualización de protocolos, la provisión de reactivos para mejorar la vigilancia epidemiológica, y la creación de una sala de situación accesible en cualquier momento para los equipos técnicos de los países centroamericanos, lo que facilita la toma de decisiones en la prevención y control del dengue.
“Nuestros esfuerzos se centran en fortalecer la capacidad de los países para enfrentar la epidemia de dengue”, afirmó Luis Gerardo Castellanos, jefe de la Unidad de Enfermedades Desatendidas, Tropicales y Transmitidas por Vectores de la OPS, en unas declaraciones remitidas a la Voz de América.
Aumento de casos de dengue en Centroamérica
En ese sentido, recalcó que “esto incluye no solo la detección y el diagnóstico rápido de los casos, sino también un manejo adecuado y oportuno de los pacientes, lo que es crucial para reducir la gravedad de los casos y salvar vidas”.
Como parte de su “estrategia de gestión integrada para la prevención y control de las arbovirosis”, la OPS estableció espacios de colaboración virtual en varios países de Centroamérica, que permiten el análisis en tiempo real de datos epidemiológicos, clínicos y de laboratorio. Esto es crucial para identificar rápidamente los brotes y tomar decisiones más efectivas en salud pública.
La OPS también reforzó la vigilancia entomológica para identificar y controlar la población de mosquitos que transmiten el dengue.
Además, ha facilitado la adquisición de insecticidas y apoyado la evaluación del uso de tecnologías innovadoras, como la liberación de mosquitos infectados con Wolbachia para mejorar el control vectorial.
Asimismo, se fortaleció la vigilancia en la resistencia a insecticidas para asegurar su eficacia o reemplazarlos cuando sea necesario.
Se mejoró la vigilancia virológica mediante la provisión de reactivos y la actualización de algoritmos para el diagnóstico y la vigilancia en laboratorio.
También se actualizaron las guías clínicas nacionales y se han ofrecido capacitaciones a los profesionales de la salud para prevenir casos graves y reducir la mortalidad.
Por Antoni Belchi / VOA