Redacción (Agencias).- El Gobierno de Transición de Haití decidió poner en alerta a las Fuerzas Armadas para enfrentar la «actual situación de seguridad» en la isla caribeña, que se ha recrudecido por la fuerte presencia de pandillas armadas en el país.
La orden fue emitida el martes por el ministro de Defensa, Jean Marc Berthier Antoine, en una misiva enviada al comandante en jefe interino de las Fuerzas Armadas, Jodel Lessage, para poner en ‘condición D’ a las tropas.
«Esta decisión surge tras una evaluación rigurosa de la actual situación de seguridad del país, marcada por importantes desafíos que requieren una mayor vigilancia y una capacidad de respuesta inmediata», detalló el Ministerio de Defensa a través de X, donde además mencionó que próximamente «se comunicarán instrucciones adicionales».
Ese mismo día, el nuevo primer ministro haitiano, Garry Conille, comentó citado por el medio local Le Nouvelliste, que ha realizado varias reuniones con socios internacionales implicados en el despliegue de la Misión de Apoyo a la Seguridad en Haití, además de conversar vía telefónica con el presidente de Kenia, William Ruto, encargado de «garantizar el liderazgo de la misión».
Además, dijo Conille, su gobierno trabaja «con la Policía y el Ejército para fortalecer su capacidad de tomar el control de nuestra seguridad».
Para ello, agregó el mencionado medio haitiano, se han activado 455 nuevos policías «especializados para ayudar a combatir las pandillas».
Estas medidas se suman al anunció que dio la semana pasada el ministro de Defensa sobre el naciente proceso de reclutamiento de nuevos soldados para el Ejército.
Además, el alto funcionario informó sobre la reorganización de la Academia Militar en colaboración con el Alto Estado Mayor del Ejército.
Alerta a las Fuerzas Armadas
De acuerdo con un reporte de Prensa Latina desde Puerto Príncipe, la capital haitiana, entre marzo y junio de 2024, las pandillas han logrado controlar el 80 % de la urbe.
En ese tiempo, los pandilleros realizaron ataques contra el principal aeropuerto del país, al igual que el puerto marítimo, escuelas, universidades, comisarías, prisiones, ministerios, bancos, la imprenta nacional, entre otros sitios estratégicos, lo que agravó la crisis económica, política y social del país.
Las pandillas, además, han causado caos en la población al ejecutar acciones contra civiles, centros religiosos, farmacias y hasta quemaron la casa del excomandante en jefe de la Policía Nacional de Haití, Frantz Elbé.
Todo este escenario de inestabilidad y desgobierno generó la creación del Consejo de Transición, mismo que designó al nuevo primer ministro.
En ese contexto también se dio el llamado para el despliegue de una fuerza internacional de pacificación de la ONU, liderada por Kenia, para ayudar en labores de orden público y lucha contra las pandillas.
Por su parte, EE.UU. ha enviado aviones de su Fuerza Aérea con armas, municiones, vehículos blindados y otros medios de combate. Sobre esto, el presidente Joe Biden, aseguró que no enviará soldados.
«No habrá fuerzas estadounidenses en el terreno. Vamos a suministrar logística, inteligencia y equipos», sostuvo en mayo el mandatario en una rueda de prensa junto a su homólogo keniano.
La ONU ha denunciado que durante el régimen impuesto por las pandillas se han cometido abusos contra los derechos humanos, incluidos asesinatos, violaciones, reclutamiento de niños y secuestros para obtener rescate, así como otros delitos.
Esta situación, calificada como «apocalíptica» por Naciones Unidas, ha escalado desde el magnicidio del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021.
Por RT