Tu cuerpo bien o mal cuidado afecta tu relación con Dios y con los demás. La salud integral de tu cuerpo afecta tu pensamiento y tu comportamiento. Tus músculos afectan tu estado de ánimo y tu motivación.
Ofrecer tu cuerpo como sacrificio vivo es algo que debes hacer continuamente como un acto de adoración ante Dios. En otras palabras, no llegues medio muerto delante de Dios. La Biblia enumera tres cosas que debes hacer con tu cuerpo.
Mantente en forma: Una oveja con defecto no era presentable para el sacrificio en el templo. Mantener tu cuerpo en buena forma física es un acto de adoración a Dios. Por ello debemos de cuidar nuestro cuerpo porque es un regalo de Dios.
En Efesios 5:29 dice “Nadie odia su propio cuerpo, sino que lo alimenta y lo cuida tal como Cristo lo hace por la iglesia”.
Cualquier tipo de cambio requiere energía y para tener energía hay que cuidar el cuerpo manteniéndose en buena forma.
En 1 Timoteo 4:8 dice “Es verdad que el ejercicio físico ayuda a que todo el cuerpo esté sano”.
Mirando y escuchando cualquier basura en redes sociales ensucia tu mente. Igualmente, si comes comida chatarra todo el día y no haces ejercicios tu cuerpo se verá tal cual, chatarra.
Controla tu cuerpo: Muchas personas saben muy bien lo que tienen que hacer para mantenerse en forma y limpio, pero les falta voluntad propia.
En 1 Tesalonicenses 4:4 dice “Cada uno de ustedes sepa controlar su propio cuerpo, como algo sagrado y digno de respeto”.
Tienes que aprender a controlar tu mente y tu cuerpo. Las excusas son fáciles de inventar porque siempre hay una buena razón para descuidarse.
Pero la disciplina en controlar tu cuerpo tiene beneficios para ahora y para la eternidad.
Concepto importante salud integral de tu cuerpo
Para que se produzca un cambio en cualquier área de tu vida, ya sea financiera, emocional, educativa, o relacional, se debe comenzar con la física.
Tu cuerpo es el vehículo que te lleva de aquí para allá.
Presentarse delante de Dios como un sacrificio vivo implica que lo haces con un cuerpo en forma, limpio, santo y agradable.
Esto no lo hacemos solamente los Domingos cuando vamos a la iglesia sino día a día.
Muchos saben que es hora de hacer un cambio en la vida, pero lo posponen para el siguiente día, semana, mes o año. Empieza hoy mismo con tu cuerpo.
Cuídalo manteniéndote en forma. Límpialo por dentro y fuera. Contrólalo con disciplina. Haciendo esto cosecharas una larga vida aquí y en el más allá.
Motivo de oración
Señor Jesús hoy vengo delante de ti reconociendo que no he cuidado mi cuerpo como debería haberlo hecho.
Hoy te pido perdón y te ruego que me ayudes y des fuerza para mantenerme en forma, limpio, santo y agradable delante de ti.
Por Arnold Enns