Santo Domingo (Rep. Dominicana).- El pastor evangélico Reynaldo Franco Aquino llamó al gobierno a mejorar políticas públicas para garantizar desarrollo sostenible del país en el umbral del 2024 que se avecina.
El líder de las Iglesias Pentecostales de Jesucristo (IPJ) y la Comunidad Apostólica Internacional (Coapin) también exhortó a los sectores productivos del país a reflexionar sobre los desafíos que enfrentará la República Dominicana el próximo año 2024.
En lo económico, Franco Aquino resalta la importancia de impulsar su crecimiento y alcanzar al menos un 5 % en el 2024 para reforzar políticas que promuevan la inclusión y mejoren la distribución de la riqueza para abordar las desigualdades sociales.
Con relación a la salud, entiende urgente invertir en infraestructuras sanitarias y mejorar la capacidad de respuesta ante emergencias, especialmente después de la pandemia de Covid-19. También llama a garantizar accesibilidad equitativa a la atención sanitaria y las vacunas.
Con lo educativo, el pastor evangélico hace énfasis en la necesidad de su revisión para asegurar que los estudiantes adquieran las habilidades necesarias para el siglo XXI. Se refiere a los resultados del Programa para la Evaluación Internacional del Rendimiento Escolar (PISA) como un recordatorio de que mejorar la calidad educativa sigue siendo un “gran desafío”.
Llamó al gobierno a mejorar políticas públicas
Desde la perspectiva institucional, destaca la importancia de la transparencia administrativa, el fortalecimiento institucional y la rendición de cuentas para construir una sociedad justa y eficiente.
En lo referente a la seguridad ciudadana hace hincapié en la necesidad de afrontar los retos concernientes con el crimen organizado, la violencia y el narcotráfico con el fortalecimiento de instituciones de seguridad y la ejecución de estrategias integrales.
Franco Aquino llamó a la renovación espiritual, instando a que Dios ocupe el centro en la vida de todos y destaca la importancia de encarnar actitudes olvidadas con el tiempo y de vivir el año nuevo con gratitud y la determinación de hacer del mundo un lugar más humano y fraterno.