Santo Domingo (Rep. Dominicana).- A pesar de la integración de nuevos supervisores y agentes, la seguridad en los hospitales sigue siendo una quimera como se evidenció con un nuevo episodio de agresión a personal de salud el pasado sábado en el Hospital Darío Contreras.
El ataque del que fue blanco un médico en el área de emergencias en ese centro de salud se suma a otros recibido por galenos y enfermeras, estás ultimas amenazaron con no ofrecer servicios a esos extranjeros sino se le pone un alto a la peligrosa situación.
Pero la situación no es nueva, en enero de este 2024 se anunció la ejecución de un programa de seguridad hospitalaria para garantizar la integridad física de pacientes, médicos y enfermeras, “debido a la gran cantidad de incidentes que se han venido reportando en los distintos hospitales del país”.
La disposición se tomó tras una petición del Colegio Médico Dominicano (CMD) de realizar iniciativas que mengüen las agresiones al personal de salud, ante el considerable incremento de ataques de pacientes en contra del personal médico dentro de los centros de atención que pertenecen al Estado en diciembre de 2023.
Como fruto de ese anuncio, el pasado 14 de marzo se informó la integración de 794 pensionados de la Policía Nacional a la seguridad en los hospitales de las nueve regionales del Servicio Nacional de Salud (SNS).
Los policías pensionados se sumarían a reforzar a los 1,700 miembros del personal de seguridad de esos centros de salud que demandaban desde hace un tiempo trabajadores de los centros asistenciales ante las agresiones que reciben de parte de familiares y los propios pacientes.
Tras la acción del pasado sábado en el Darío Contreras, este martes el Departamento de Seguridad Hospitalaria del SNS asegura que “implementa acciones constantes para fortalecer la seguridad en los hospitales y Centros de Primer Nivel (CPN)”.
Sigue siendo una quimera
En un comunicado de prensa, en el cual condenan la acción contra el profesional de la salud, expresa que el objetivo de sus acciones es “salvaguardar en todo momento la integridad física de los usuarios, el personal médico y administrativo que presta servicios en los establecimientos de la Red Pública”, lo que no fue efectivo en el dicho caso.
Pese a que José Heredia, encargado de Seguridad Hospitalaria del SNS, detalló que este año se integraron 1,419 nuevos supervisores y vigilantes en hospitales y CPN, estos no se vieron en los videos que circulan en las redes donde se evidencia la acción contra el facultativo.
Según el militar, el 57.53 % del nuevo personal se integró al Servicio Regional de Salud Metropolitano y el 42.47 % restante “distribuido de forma estratégica en diferentes establecimientos de salud a nivel nacional, según las necesidades de reforzamiento de seguridad recibidas en los informes de supervisión”.
Heredia garantizó “un entorno seguro en las instalaciones de salud, para quienes laboran y reciben servicios, nos mantenemos integrando personal y dotándolos de las capacidades y herramientas necesarias para controlar cualquier situación que se pueda presentar”.
Según las palabras del castrense, “el personal de Seguridad Hospitalaria protege a los usuarios” al asegurar que aplican un “enfoque riguroso en las supervisiones ha permitido identificar áreas de mejoras e implementar medidas preventivas y correctivas de manera oportuna”.
“El SNS ha capacitado el personal en aspectos críticos de seguridad y respuesta ante emergencias, con el interés de crear entornos más seguros y eficientes para pacientes y trabajadores de la salud”, dice un parte de prensa.
