Redacción (Agencias).- Una nueva investigación de la Universidad de Tel Aviv (TAU) encontró que los niños que sufren trastornos respiratorios durante el sueño a menudo los diagnostican erróneamente con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y se les recetan medicamentos inadecuados.
Investigadores de la Facultad de Medicina Dental Maurice y Gabriela Goldschleger de la TAU descubrieron que los niños con trastornos respiratorios durante el sueño recibían medicamentos para el TDAH a un ritmo siete veces mayor que los niños que no padecían dichos trastornos.
Los trastornos respiratorios durante el sueño son comunes entre los niños. Se caracterizan por ronquidos y/o interrupciones parciales o completas de la respiración durante el sueño, lo que provoca una interrupción del flujo de oxígeno en la sangre durante el sueño.
La falta de flujo de oxígeno puede perjudicar el crecimiento y desarrollo del cerebro del niño y provocar trastornos cognitivos y de conducta, entre ellos dificultades de aprendizaje, hiperactividad, fatiga y falta de concentración.
Diagnostican erróneamente
Debido a que los síntomas son similares a los del TDAH, esto a menudo conduce a un diagnóstico erróneo y a un tratamiento innecesario con medicamentos como Ritalin, dejando la enfermedad real sin tratamiento. A veces, el medicamento puede incluso empeorar la afección.
El estudio se realizó entre 227 niños de cuatro a 12 años atendidos en la clínica infantil de la Facultad de Odontología TAU en los años 2020-2022.
La investigación la dirigieron Shani Kaminsky-Kurtz, Sigalit Blumer, Ilana Eli, Alona Emodi-Perlman y Yarden Shreiber-Fridman de TAU.
Para crear conciencia sobre el problema, los investigadores compilaron una lista de cuatro síntomas respiratorios de los trastornos del sueño: tomar medicamentos para el TDAH, sueño discontinuo, ronquidos y respiración bucal.
Dicen que los síntomas son identificables con la ayuda de un cuestionario sencillo como el Cuestionario de sueño pediátrico de EE. UU., que pueden completar los padres o los médicos de familia.
Kurtz-Kaminsky dijo: «La forma más confiable de diagnosticar los trastornos respiratorios del sueño es monitorear a los niños en un laboratorio del sueño, pero este es un procedimiento costoso con disponibilidad limitada y no se recomienda para los niños».